No es que antes no importara, sino que hoy vemos cada vez a más mujeres decididas a cuidarse y a mantenerse bellas, a mujeres que se preocupan por ellas mismas y que quieren sentirse a gusto todo el tiempo.
Y es que no es cualquier cosa, no basta con decir que queremos cuidarnos, hay que hacerlo, y la mejor forma de hacerlo es siendo conscientes del entorno, de todo lo que nos rodea, y conociendo cada detalle de nuestro cuerpo, y eso implica conocer también a la perfección nuestra piel.
Una piel sana siempre lucirá radiante, y no hay duda de cómo no vernos bellas con una piel espectacular, y eso se logra a base de los mejores cuidados, ¿conoces qué tipo de piel tienes y cómo debes cuidarla?
En ocasiones caemos en la tentación de utilizar mascarillas para desvanecer arrugas, líneas de expresión o manchas, e incluso optamos por usar cremas que prometen los mismos beneficios, pero si no conocemos a fondo la piel que cada una tenemos, podríamos incluso provocar un daño.
Existen cuatro tipos de piel, y definitivamente no pueden atenderse todas por igual, porque tienen reacciones diferentes, te contamos cómo puedes identificarlas:
No tiende a mostrar sensibilidad, por lo que el uso de una variedad de mascarillas es aceptable, debido a la poca probabilidad de tener reacciones alérgicas.
- Poros finos
- Textura suave y lisa
- Color uniforme debido a la buena circulación
- Ausencia de impurezas
La piel seca puede presentarse a cualquier edad, y es necesario humectarla constantemente e hidratarla desde adentro, por lo que siempre es recomendable tomar mucha agua y consumir alimentos ricos en vitaminas.
El uso de mascarillas para este tipo de piel es muy específico, ya que siempre deben ser a base de productos suaves como cremas o aceites que contengan propiedades hidratantes, o bien, a base de frutas como el aguacate.
- Aspecto áspero
- Picor o comezón constante
- Sensación constante de resequedad
Este tipo de piel es delicado, y debe cuidarse de la mejor manera posible. Hay muchos productos que deben evitarse, como el uso de cremas sobre el rostro o cualquiera que esté hecho a base de aceites, ya que puede perjudicar ciertas zonas e incluso provocar el brote de acné.
Las mascarillas que pueden utilizarse en este tipo de piel, suelen ser única y exclusivamente dermatológicas, por lo que no es conveniente el uso de mascarillas comunes y protectores con base en gel o loción.
- Poros grandes y visibles
- Brillo sobre el rostro
- Aparición de puntos negros
Este tipo de piel es delicada incluso para ciertos climas, suele haber reacciones tras el uso de mascarillas no dermatológicas y es recomendable una alimentación sin excesos de grasa.
- Brillo frecuente en la zona T
- Poros grandes
- Impurezas sobre la zona T
Conocer tu piel es fundamental para saber cómo tratarla y sin importar el tipo que tengas, debes saber que necesita de antioxidantes y vitamina E para verse espectacular, así que el primero paso para cuidarla es tomando Eternal®, 2 a 4 cápsulas al día, para proteger las células de tu piel y lucir bella todos los días.
